
Ficus carica
Higuera verdal
Familia moráceas
Árbol de porte mediano y hoja caduca. El tronco suele ser algo tortuoso, grisáceo, con ramas distales que suelen disponerse hacia abajo. Las hojas son simples, pecioladas, con 3-7 lóbulos sinuosos y de senos profundos, de color verde obscuro por el haz y más claras por el envés. Las inflorescencias que se presenta en las ramas de segundo año, aparecen normalmente sobre abril, dando lugar en junio o julio a las brevas. Los higos se forman sobre las ramas del año, siendo luego más precoces los frutos de las variedades verdes que los de las negras.
La etnovar. “Verdal” se caracteriza por sus hojas con peciolos gruesos y cortos, amarillos, de 3-5 lóbulos, profundamente divididas. Produce higos (apenas brevas) medianos a grandes, globoso y aplastado en el ápice. Piel verde con una pruina verde azulada. Se agrieta cuando está maduro y la pulpa es blanca con filamentos rojizos, muy azucarada.
Como con otras especies cultivadas, existe controversia sobre el origen de la higuera, situándose entre el sur de Asia y Etiopía. La etnovar. “verdal” está relativamente extendida en la zona mediterránea, pudiendo englobar distintas subvariedades.
La higuera puede medrar en casi todo tipo de suelos, mejor los fértiles y no muy compactos. Es resistente a fríos no intensos una vez ha perdido la hoja, pero las heladas tardías pueden ser afectarla. Es capaz de vivir en condiciones de secano, pero su producción mejora sustancialmente con aportes de agua periódicos en verano.
La higuera fue un árbol sagrado en el antiguo Egipto; para los egipcios, según su texto sagrado (Libro de los Muertos), dos sicomoros se encuentran en la entrada del Cielo, que dan cobijo y alimento a los muertos. Su madera, densa y rígida, a la vez que porosa, se empleó para construir sarcófagos y no faltaba junto a los estanques de los jardines egipcios. También se cita en la Biblia, fue el árbol al que se subió un personaje bíblico.
Además de en diversas formas en alimentación (en fresco, cocinados, mermeladas, secos, pan de higo, arrope, etc.), tiene usos en medicina tradicional como laxante, para calmar la tos, indigestiones, antidiabética, quistes, verrugas, etc.